Mujeres con amor propio

Hablar del amor propio en la mujer,  ha sido para mi un tema primordial para la re valorización de cada una de nosotras.  primero que todo en nuestros hogares y después no menos importante, en nuestra sociedad. 

Un día sin mujeres,  como el que fué promovido el pasado 09 de Marzo, que por cierto, fué mi cumpleaños, no es suficiente para demostrar lo necesarias que hemos sido a través de todos los tiempos. Realmente si las mujeres nos pusieramos en huelga, si sería caótico., se colapsaría el país porque realizamos multi responsabilidades que solo nosotras podemos llevar a cabo., sin duda alguna se colapsaría la sociedad. Según una encuesta del Inegi, las mujeres realizamos arriba del 76% de las actividades del hogar. 

Este artículo lo escribo basada en mi experiencia terapéutica de poco mas de 13 años,  como psicóloga,  y psicoterapeuta de parejas. Y un poco basado en mi experiencia personal, pues no dejo de ser una mujer que siente y que viví la violencia desde que fui una niña., (si, yo también sufrí episodios de violencia  y no sabía como amarme), no me extraña entonces, que haya querido estudiar psicología,  que efectivamente, lo hice para poder comprender a las personas y mi propia vida así como lo hacen la mayoría de mis colégas psicólogos. 

Recuerdo el primer día de clases,  cuando entre a estudiar la carrera., me dijo mi maestro; Sandra, y tu ¿porqué entraste a estudiar psicología?: yo contesté muy diferente a mis otros compañeros. Mi respuesta fué: para entenderme yo, ayudarme yo y después ayudar a los demás. Mis compañeros y mis maestros se sorprendieron con mi respuesta porque todos contestaban que para ayudar a los demás, lo clásico.  Ahora es muy diferente, sé quien soy y lo que quiero, también lo que no quiero, me amo y me acepto tal y como soy, fue un largo proceso. Al final, creo que lo logré, aún así, sigo reforzando ese amor propio todos los días. Esto es verdad 

Una mujer nace con una gran autoestima y un enorme amor propio. Conforme vamos creciendo y vamos pasando las muchas etapas de nuestro  desarrollo, las cosas no se muestran como si vivieramos en un paraíso terrenal y todo fuera miel sobre hojuelas. Existen circunstancias o conductas de nuestros seres queridos que nos hacen dudar de nuestra propia valía. Y es entonces que nos damos cuenta de que la violencia, el dolor  o las injusticias forman parte de la vida.

Si tu de pequeña,  no recibiste elogios por tus logros, o no aprendiste a valorarte, no te dieron amor tus padres o seguridad. Si las personas que habrían de haberte amado mas que nadie y protegido, no lo hicieron, o las personas con las que te criaste, entonces esa puede ser una de las razones por las que no te sientes valiosa, bonita, merecedora de lo mejor, ni tampoco crees que te puedan pasar solo cosas buenas. 

Si tus padres sufrieron algún tipo de violencia cuando eran pequeños, es muy probable que como adultos, ejerzan algún tipo de  violencia (no es una regla general, es una probabilidad ), porque es lo que vivieron, lo que sufrieron en su hogar, lo han vivído, lo han incorporado. Si los padres biológicos de ellos,  también fueron violentados, existe un alto porcentaje mayor de que tendrán tendencia a violentar. Es una cadena que viene de mucho tiempo atrás. Tus padres fueron víctimas de sus padres y los padres de tus padres de los suyos y así sucesivamente, en conclusión, somos víctimas de víctimas. 

Con esto,  no los estoy justificando, simplemente estoy abriendo tu panorama para que puedas comprender de dónde viene. En una ocasión, tuve un consultante hombre, que por cualquier cosa se irritaba, y gritaba, ofendía física o verbalmente a sus familiares o a su esposa,  sin un motivo aparente. Tengo el carácter muy fuerte, me dice, soy un gruñon, soy peleonero, nada mas estoy buscando quien me la pague.

Su esposa es una hermosa mujer que había tenido un aborto y que sufría mucho por el comportamiento y las agresiones constantes de su esposo., cualquier cosa lo mantenía irritado, le gritaba, o en algunos casos, la insultaba. El era muy cariñoso y considerado con los niños pequeños, con ellos es con quien realmente podía sentirse el mismo. 

Conforme fueron avanzando las sesiones individuales,  me contó  de la violencia y las exigencias que tuvo de su padre, quien era un hombre muy duro e implacable en su manera de educar a sus hijos. El tenía otros hermanos varones y con ninguno fué tan duro y agresivo como con el. Vivió toda su vida pensando que su padre lo odiaba, o que no era su hijo biológico, como una forma de entender o "justificar" tanta agresión hacia el. 

Ya de adulto, la relación con su padre (quien era ya un anciano), estaba llena de hostilidad, le gritaba y lo  trataba de una manera agresiva, o con desprecio. Realmente podía darme cuenta de todo el dolor contenido que guardaba en su alma y no lo dejaba ser libre, lo mantenía atado al doloroso pasado que sufrió siendo tan pequeño. El había lastimado,  sin querer a su linda esposa y a otras personas por todo el rencor y coraje que sentía hacía su padre. 

El lenguaje con el que se dirigia hacia su padre, según me contó el,  era muy irónico y ofensivo (pensaba que todos lo ofendían o querían lastimarlo,  entonces el estaba listo para contestar y para defenderse pues constantemente pensaba que lo agredían, ahora podía defenderse, ya no tenía 5 años y podía hacerlo). No pude dejar de conmoverme hasta las lágrimas de esta historia tan aterradora para un niño tan indefenso y vulnerable a esa corta edad y siendo adolescente, su padre seguía siendo muy duro y cruel con el. 

Afortunadamente,  pudimos avanzar a sub sanar ese gran dolor y caminar hacia el perdón a su padre. Fué realmente muy difícil para el poder perdonarlo, pues cuando lo hizo, el volvió a ser ese pequeño niño de 5 años que necesitaba urgentemente las disculpas de su anciano padre, así como también sus abrazos y su amor. Cuando lo hizo no dejaba de llorar (la mente no conoce tiempos y todo lo que se recuerda se vive en tiempo presente). Siempre es ahora. Cuando  pudo hacerlo, le estuvo doliendo como la primera vez .

De esta manera,  este gran hombre, porque lo es,  pudo vivir en completa libertad y cambiar su forma de ser para demostrar amor y respeto a su esposa,  sentirse amado y dejar de tener miedo a ser agredido o a no sentirse merecedor de estar en paz con el, con su padre y con el mundo. Les cuento esta historia para que ustedes puedan comprender un poco la violencia de género,  que viene casi siempre de la educación machista de los hombres en donde las mujeres debemos de obedecerlos y las mujeres venimos a servir al hombre. 

En este ejemplo, no está el clásico caso del  hombre que violenta a la mujer, sino mas bien, es un hombre que violenta a otro hombre y por consecuencia, el violenta a su esposa y a quién se le ponía en frente. Cabe hacer la aclaración, que he atendido varios casos muy parecidos de hombres violentados por sus  padres y han sido adultos que se dicen con un carácter muy fuerte y que han sido violentos con su pareja y/o sus hijos. En unos casos ya están separados de su pareja o esposa .

Existe una característica en muchas mujeres que he tenido como consultantes. Muchas de ellas no se aman a sí mismas, por ese motivo,  permiten cualquier tipo de violencia o abusos.. Pueden ser mujeres que tienen profesión, maestría o hasta doctorado, de cualquier estrato social, y además, son mujeres hermosas, lindas, que se sienten feas y si su pareja las insulta (se lo creen), porque no se aman a sí mismas. 

Una mujer valiente, que sabe lo que vale como ser humano, que sabe defenderse, definitivamente,  no puede, de ninguna manera permitir agresiones. Cuando se permite  cambiar el chip, o más bien, cuando toma conciencia de que puede hacerlo, cambiar de víctima a mujer merecedora, se alejan de ella todos los hombres que ya no resuenan en ese victimismo, pues para que haya violencia, se necesita la víctima y el victimario., y al dejar la mujer ese rol, solo queda el victimario. 

Otro tipo de mujeres,  que son todo lo contrario a las que se victimizan, son las que dicen lo que quieren, lo que no les parece, toman iniciativa propia, conocen sus propias habilidades y sus limitaciones, mujeres que ayudan a otras, a niños, o ancianos, que mueven masas, seguras de si mismas, líderes, son la nueva historia. 

Estas mujeres, no se despertaron un día y dijeron, me voy a amar mas a mi misma porque si. Estas mujeres, son sobrevivientes de la violencia de género,  fueron violentadas por su esposo y/o pareja, por su madre, su padre, sus hijos, hermanos, tíos, su abuelo, o cualquier otro hombre importante en su vida. Fué una decisión después de haber llorado lágrimas amargas de soledad, desamor y desilusión. 

Mientras se siga educando a los hombres conductas machistas, seguirá habiendo violencia de género. Educar en el respeto y la equidad de género es un muy buen comienzo. 

Uno de los pilares para una sólida autoestima, también llamado  amor propio, es el auto conocimiento., para esto, es necesario conocerse uno muy bien. Es un proceso que hay que practicar a diario, es un trabajo de introspección (es un proceso capaz de analizar tus propias experiencias, es una auto observación de los procesos de consciencia, con los  cuales podemos conocernos mejor y aprender formas mas agradables de tratarnos, cuidarnos, valorarnos y sentirnos merecedores de lo bueno de la vida. He aquí un ejemplo sencillo: 

1.-¿Cuáles son tus puntos fuertes? y ¿cuales son los  débiles?

2.-¿Cuáles son tus habilidades?

Hacer una lista de las cosas que te gustan hacer y te sientes feliz 

3.-¿Que es lo que  mas te frustra?, ¿cuáles son tus miedos?

4.-¿Cuales son tus pasiones? ¿Que te hace feliz ?

5.-¿Que te irrita y no soportas?

6.-¿Quien soy? ¿porque soy así?

7.-¿Hacia donde voy?

8.-Haz una lista de las tres ultimas relaciones que has tenido. Date cuenta cuales han sido las cosas parecidas entre esas tres relaciones y de los errores que has cometido y en lugar de criticarte, pregúntate que es lo que  puedes aprender de este (os) tropiezo (s)? haz consciencia para que en la siguiente  mejores.

9.- ¿En que  cosas  te sientes  segura y en cuales insegura?

10.- Cosas que sabes hacer y las haces bien (desplayate)

Algo que  no hace una persona con un bajo amor propio, es aceptar los elogios.  Los elogios son un regalo y hay que aceptarlos. Entre menos autoestima tenemos, nos es más difícil poder recibirlos.  Les cuesta mucho trabajo a mis consultantes mujeres hacer una lista de sus cualidades personales tales como valores morales, habilidades, o de su belleza física., en su gran mayoría se ven muchos defectos y realmente son mujeres hermosas con cuerpos muy bonitos y ellas no los ven así.

Poco a poco hay que ir construyendo un amor propio, lo suficientemente sólido con bases fuertes,  todos los días con pequeños detalles de comprensión y cariño hacia uno mismo (a). 

Cuando se exagera la auto valoración, eso no es un amor propio, en realidad es miedo, ego y eso dista mucho del amor hacia uno mismo. Hay que saber identificar cuando se trata de un amor saludable. 

Este texto lo he escrito de mi experiencia psicológica y de los textos, talleres y/o videos de la psicóloga especialista en amor propio y relaciones de codependencia: Silvia Congost. Deseo de corazón que les sea de utilidad y que también lo lean todos aquellos hombres que quieran reforzar su amor propio o su auto estima. 

#psicologaysexologasandraroque

#psicologatepic

#psicoterapeutasexualtepic

#sexologatepic