De última hora

La violencia en la familia



Creo, sin temor a equivocarme, que casi todas las personas hemos vivido algún tipo de violencia en el hogar en que nos formamos. ¿de donde viene? bueno, para empezar les diré que son muy poco comúnes los padres que han sido cariñosos con sus hijos (as) cuando eran pequeños (as). Si fuiste el (la)  consentido (a) o mejor aún, el chiqueado de papá o de mamá, entonces te sales de la norma común y digamos que eres un ser "afortunado" (a). Lo pongo entrecomillas porque el haber sido el chiqueado (a) de la familia y el haberte complacido en todo eso causa otro tipo de problemas cuando eres adulto. Siempre y cuando no haya habido reglas claras en casa. Ese será todo un tema que les puedo escribir más adelante.

Hay una escritora llamada Susan Forward que ha escrito un libro que se llama "padres que odian" se los recomiendo ampliamente. En esta lectura manifiesta la psicoterapeuta que la mayoría de los padres no han sabido expresar sus afectos porque sus padres no fueron muy cariñosos con ellos, es mas, a veces crecieron creyendo que no eran importantes para ellos porque casi no les hacían caso., o que no los amaban porque no demostraban su amor, o muy pocos lo hicieron. En muchos casos alguno de los padres ha sido violento o a veces ambos.

Ella dice en su lectura que casi todos nuestros padres recibieron violencia de pequeños o fueron ignorados por sus padres y que somos víctimas de víctimas, osea, que si nuestros padres recibieron violencia de niños, es porque sus padres fueron violentos con ellos y que así va la cadenita hacia atrás. Nadie puede dar lo que no tiene y si ellos aprendieron la violencia como una forma de demostrar el amor, eso lo van a representar como adultos, no en todos los casos, por supuesto, mas si en su mayoría a pesar de no querer hacerlo. 

Si tomamos en cuenta,  que cuando nuestros padres nacieron las familias eran mas numerosas, la madre se preocupaba de hacer la comida y atender a los mas de diez hijos que tuvo, entonces, ¿a que hora iba a estar tan fresca y relajada como una lechuga para proporcionar cuidados a cada uno de los hijos (as) o darles cariño?

El trabajo de una ama de casa es tedioso, repetitivo e infravalorado. Decir en este siglo XXI que se es ama de casa, habría de ser considerada una actividad de respeto y valor. Una mujer que tiene un empleo, aparte se hace cargo de las labores del hogar y de los hijos, entonces, aumentan sus multiresponsabilidades.


Sabemos que no solo en el transcurso de nuestra vida somos educados en casa, con lo que nos inculcan como valores morales nuestros padres, si no también en la escuela que es nuestro segundo hogar. Nuestros padres,  nos enseñan con sus palabras y sobre todo con su ejemplo. Por ahí hay un dicho que dice: la palabra enseña pero el ejemplo arrasa. Esto es tan cierto,  como que después de la tormenta aparecerá la calma.

Los padres son los principales influyentes en la visión que tenemos en el mundo. En la familia es donde podemos desarrollar la confianza en los demás, la seguridad en nosotros mismos (as) y así fortalecemos nuestro amor propio y la manera en la que nos dirijimos al mundo. Es en la familia donde se deben afianzar los valores de la responsabilidad, la confianza, el apoyo mutuo y la consideración.

Existen muchos tipos de familias y lamentablemente no todos los pequeños (as) corren con la suerte de ser educados con valores y amor de sus padres y parientes cercanos. La incapacidad de los padres para enfrentar los problemas cotidianos en ocasiones puede llevarlos a desarrollar respuestas violentas.

La violencia es un problema social que afecta diversas áreas de nuestra vida. Todas las personas estamos expuestas a algún tipo de violencia o incluso, nosotros mismos (as) también podemos generarla de alguna manera sin darnos cuenta a veces de que estamos siendo violentos. Esto puede ser no solo en las palabras que decimos,  sino también en la manera de contestar, los gestos que podemos hacer minimizando a los demás, entre muchos. 

No importa las diferencias de etnias, religión, edad, estado civil, condición mental, género, ni tampoco el nivel socioeconómico. Podemos encontrarla en el trabajo, en la calle, en nuestra comunidad, en la forma en que nos relacionamos con las personas, en la escuela, con amigos, con el novio (a), con nuestra pareja o en casa con nuestros padres. 

La violencia se aprende, se enseña. Una persona no nace siendo violento (a). desafortunadamente, casi siempre, cuando se vive una infancia llena de violencia, la persona tenderá a la repetición de la misma. Actualmente no podemos encender la televisión en cualquier canal porque en todos existe la violencia. Esta es una realidad mundial.

Canal que pones, hay violencia, se vive en un mundo amarillista, en donde venden mas las noticias catastróficas que las noticias sanas para la mente, estas últimas no tienen ninguna relevancia. Las notificias nefastas son las que generan morbo, y cantidades innumerables de dinero, ahí está el negocio, se llena a la sociedad de miedo y violencia desde edades muy tempranas. 

En ocasiones,  puede ser que quien esté viviendo episodios repetitivos de violencia esté bajando de calificaciones y sea un blanco fácil para que otras personas los violenten y/o abusen de ellos (as)
En las familias se tienen penas y alegrías. En ella aprendemos a comportarnos socialmente y a relacionarnos con los demás, así como maneras para efrentar la vida y resolver problemas, por eso es tan importante para nuestra educación.

Una familia en la que todos aprenden a resolver sus conflictos de mutuo acuerdo, construye día con día un ambiente de tranquilidad, bienestar, tolerancia y seguridad que enriquece tu vida.
Hay otros tipos de familias que tienen una vida complicada llena de problemas económicos, adicciones, trastornos mentales, es una vida muy difícil de sobrellevar. No hay una comunicación clara y amorosa. A los miembros de este tipo de familia, les es difícil apoyarse y demostrarse afecto, y en muchas ocasiones terminan maltratándose y distanciándose. Tienen un problema muy grave: la violencia familiar.

Si no se atiende a tiempo puede salirse de control y si se resuelve a tiempo tienen la oportunidad de evitar muchas desgracias o desavenencias irreconciliables con el tiempo.
La violencia en la familia es en el lugar donde debería ser mas seguro y confiable. Por ese motivo se ha convertido en un problema social porque gracias a ese tipo de violencia es que existe la violencia en las calles.

No  resuelve la violencia un gobierno que construye más cárceles o capacitando mayor número de policías, se resuelve,  evitando la violencia desde los hogares, previniendo desde su origen. Capacitando a los jóvenes en trabajos dignos, dando opciones para generar empleos, motivar el estudio,  apostar al 1,000 por ciento en campañas de salud mental, hospitales, atención psicológica y/o psiquiátrica para garantizar mejores seres humanos y una sociedad libre de violencia.

La violencia en la familia empieza cuando uno de sus integrantes abusa de su autoridad, su fuerza o su poder. Maltrata o agrede de alguna forma a las personas mas vulnerables (expuestas) hijos (as) esposa (o) madre, padre, u otros miembros de la familia que están indefensos. 

La violencia se manifiesta en diferentes grados como pueden ser coscorrones, pellizcos, gritos, insultos, golpes, humillaciones, burlas, castigos y silencios, hasta abusos sexuales, violaciones, privación de la libertad, lesiones leves o mortales. Se puede presentar entre uno o varios integrantes de la familia y en ningún caso se justifica. Es una forma de cobardía

La violencia mas común es hacia las mujeres, niños, ancianos y personas con algún tipo de discapacidad. El que una persona dependa económica, moral y emocionalmente de otra,  en ocasiones facilita que esta última abuse de su autoridad.

Puedes escuchar frases tales como: Yo soy el que manda porque te mantengo, "aquí se hace lo que yo digo" "la única forma en la que entiendes es a golpes" "te gusta que te golpee para que sepas quien manda aquí".

Cuando una persona es violenta,  no existe conciencia del daño que se ocasiona a los demás, en especial a los niños (as) porque son los seres mas indefensos.

Existe estrés en las personas que carecen de recursos económicos, pérdida de empleo o circunstancias que producen preocupación constante. Faltan momentos de esparcimiento,  de convivencia con la familia y para la vida en pareja, pues se dedica bastante tiempo en proveer económicamente de que no les falte comida y lo necesario para vivir.

Puede haber un cúmulo de desiluciones tales como infidelidad conyugal, un nacimiento no esperado o planeado, abandono de la pareja. Pasar mucho tiempo en las redes sociales impide que existe una buena comunicación con la familia y también impide una convivencia real, auténtica.


¿que podemos hacer para mejorar nuestra relación con la familia?

Comunicar lo que sentimos, lo que queremos, lo que nos gusta, lo que nos disgusta. Escuchar con atención sin juzgar y sin gritos ni enojos. Si te enojas con tu hijo (a) por una conducta inapropiada, señala tu enojo por la conducta. Evita emitir calificativos que denigren o dañen su amor propio, se muy específico al señalar la conducta que rechazas, debe quedar bien claro el mensaje que quieres dar. Debes darte cuenta que los hijos e hijas necesitan límites, y que es a los padres los que nos corresponde enseñarselos sin violencia y con amor. Un ingrediente primordial es la firmeza, la determinación.

Hay quienes erroneamente creen que los límites se los tienen que dar en la escuela. Para ese entonces, ya será demasiado tarde.

A los niños que han sido muy consentidos o chiqueados (as) de pequeños se les debe enseñar a manejar la frustración y entender que no siempre se va a tener lo que se quiere y cuando se quiere. 
Es necesario entender también, que si se les ponen límites y se les castiga o reprende, no puede ser sinónimo de abuso en ninguna de sus formas,  ni tampoco que se hace por gusto. Es hacerlos responsables de sus propios actos aún si son pequeños, de hecho, es mejor que desde pequeños sepan respetar a los demás y hacerse responsables. 


Lo que jamás deben hacer los padres es desquitarse con violencia con su hijo o su hija por problemas conyugales que se tenga con la pareja o frustraciones personales que tengan. Los límites se ponen por ejemplo: entre lo que pueden o no pueden hacer o decir. Cuando participar, donde y cuando jugar, como tratar a los demás y como pedir ser tratados. Conocer cuales son sus derechos y cuales son sus obligaciones también.

De aquí la importancia de saber poner límites. Es mas fácil hacerlo con decisión y firmeza cuando es necesario sin caer en el abuso y el trato indebido. Recuerda que tus hijos por mas pequeños que sean te están observando y escuchando todo el tiempo. En pocas palabras, están siguiendo tus pasos, ellos van detrás de ti como esponjitas imitando cada uno de tus gestos o tus movimientos, Son 100% perceptivos, lo malo es que los que somos adultos,  vamos perdiendo esa capacidad de percepción que tuvimos cuando fuimos niños (as).

Toda forma de violencia es inaceptable. El maltrato a los niños (as) nunca se justifica y tampoco resuelve ningùn problema, al contrario, lo agrava. Hay padres que aprendieron que sólo asì entienden los niños. Para cambiar actitudes o creencias, se requiere primero reconocer la necesidad de cambio.

A los niños (as) se les debe explicar del sentido que tienen las diferentes tareas del hogar y sobre hacer su tarea. Así como se les da cada instrucciòn y como cada miembro de la familia realiza distintas actividades con la finalidad de que la casa esté limpia, ordenada y como ayudar a mamá a que nos haga de comer o en las labores en general.

En las familias cuyo uso del poder sobre el mas débil o el mas vulnerable y el uso de la fuerza son los recursos con los que se cuenta para cualquier situación convirtiendolo en violencia, los niños mediante empujones, pellizcos, jalones de cabello, golpes o insultos, entre otros, aprenderán a someterse a los que son mas fuertes que ellos y también lo repetirán a quiens vean mas indefensos. En pocas palabras, tendrán tendencia a repetir los mismos actos que les generaron tanto miedo.

Los niños generalmente juegan a golpearse y se les enseña a ser violentos. Quiero aclarar que no solo el padre es violento, tambièn la mamá en ocasiones también lo es. Es muy probable que a los hombres y mujeres golpeadores les haya faltado atención, afecto y amor en su niñez., así como es muy probable que también hayan sido violentados de alguna u otra manera.. Cuando se es adulto, las conductas violentas se pueden dar de manera compulsiva (que quiere decir, sin pensarse), no se pueden controlar por si mismas. Son personas inseguras y recurren a los gritos o insultos, o bien a tener actitudes autoritarias o en casos mas frecuentes a los golpes.

¿Cómo evitar la violencia en casa?


Se han de conocer las actitudes y los comportamientos de cada uno de sus hijos y que distingan entre aquellos que los dañan y son difíciles de resolver, y los que se pueden corregir hablando y marcando límites claros a tiempo para no llegar a tener respuestas violentas. La obligacón de los adultos es medirse y evitar extralimitarse.

¿que haces cuando te enojas?

Golpeas
Gritas
Te callas?
Avientas objetos?
Te vas?
Insultas?


Como padres se pueden tener muchas expectativas en relación a los hijos (as) . Se debe ser realista de acuerdo a la edad,  sus intereses y su personalidad. De lo contrario, se les exigirá mas de lo que ellos quieren o pueden lograr y si fuera así,  siempre estaremos insatisfechos.

Hay personas que bajo la influencia de las drogas o el alcohol se ponen violentos con sus hijos (as) o con su pareja y cuando llegan en estado de ebriedad o drogados, ya saben lo que les espera.
La violencia se genera cuando la pareja acumula tensiones, estrés, enojos y frustración, así como dificultades y agresiones que se viven tanto en la familia como fuera de ella. La violencia que se vive enla calle, en el trabajo, o en la escuela, se lleva a la casa. De igual manera, la violencia que se vive en el hogar se lleva a la calle.

Para algunas personas,  la violencia se llega a convertir en su estilo de vida: las personas se acostumbran a ella y la viven como si fuera natural, sin darse cuenta de que aumenta en forma gradual al ocultarla o negarla. Se empieza a dar por reclamos mutos, falta de atención, cansancio, problemas económicos o laborales o por frustración. Este tipo de hechos puede desencadenar actos violentos. Lo mejor es tener una comunicación respetuosa y hacerte consciente de cual es el motivo real del enojo o la frustración que estás viviendo.

Escucha atentamente lo que tu pareja tiene que decirte. Después de un episodio violento, el hombre o la mujer tendrá tendencia a sentirse arrepentido (a) por su falta de control. Le hechará la culpa a ella misma o al alcohol, o al cansancio o dirá que fué provocado. En casi todos los casos de violencia doméstica., las mujeres se sienten indefensas, creen que estan solas y que no pueden hacer algo al respecto, además, si hablan después la golpeará aún mas y eso no quiere ella.

Después viene una etapa que es conocida como reconciliación o luna de miel en donde el golpeador (a) se muestra arrepentido (a), cariñoso, tierno y muy amable; se da cuenta del daño que causó. Se puede disculpar diciendo que perdió el control lo cual es cierto y convencido, promete que nunca más volverá a violentarlo (a).

En este tiempo de la reconciliación es cuando pueden pensar en la posibilidad de acudir a psicoterapia con la finalidad de mejorar su relación de pareja y familiar. Entre mas violencia haya y menos ayuda se reciba, el periodo de reconciliación cada vez será menos estable y menos duradero.

En algunas ocasiones no solo la violencia se sufre con la pareja , sino que también toman partido otra parte de la familia como la suegra, el papa, la mamá, las cuñadas, las tías o por los propios hijos (as).
No solo las mujeres y los niños (as) sufren violencia. También los niños están expuestos a ser violentados o abusados cuando no es por mujeres, también lo son por otros hombres. En ningún caso, la violencia es aceptable, por el contrario, es una conducta que se ha convertido en un problema social que nos incumbe a todos para prevenir y subsanar psicoterapeuticamente  cuando ya están siendo violentados.

Las personas que sufren violencia de cualquier tipo, es muy común encontrar que no se valoren , ya que desde pequeños (as) han sido golpeadas (os) o maltratadas (os) tanto por personas de su familia y ajenas. El tipo de personas que permiten el maltrato son personas que no se sienten merecedoras de ser respetadas ni tampoco valoradas y mucho menos amadas por ellos (as) mismos (as) y menos van a creer que los demás los amen.

Por este motivo , cuando encuentran cualquier nueva relación, tendrán tendencia a permitir que el otro o la otra controlen lo que piensan , sienten, hacen o dicen y que los (las) maltraten. Por este motivo caen fácilmente en el víctimismo y las personas violentas traen un radar y saben a quienes sí pueden violentar y precisamente son de esas personas por quienes se sienten atraídos. Permitir que los hijos (as) el esposo (a) se expresen libremente de sus necesidades, emociones, expectativas de forma clara y siendo muy respetuosos sin ser maltratados o criticados.

Cuando te encuentres discutiendo con tu pareja o hijo (a) antes de reaccionar. Detente un momento y piensa en el daño que puedes seguir ocasionando si continúas reaccionando de forma visceral (son las personas que yo llamo reactivas), que reaccionan enojándose o gritando o diciendo alguna palabra altisonánte ofendiendo a quien les escucha.

Ejemplos de los tipos de violencia:

Violencia emocional.

En ocasiones no se percibe tan fácilmente, sin embargo, también es lastimosa. La intención de este tipo de violencia es humillar, avergonzar y hacer pasar un mal momento e insegura a una persona. Con este tipo de violencia, se deteriora la imagen y el propio valor, se daña el estado de ánimo, se disminuye su capacidad para tomar desiciones y para vivir su vida con gusto.

El tipo de palabras empleado en este tipo de violencia, no hace sentir nada bien a la persona que las escucha, pareciera que no hace las cosas bien. La violencia no verbal es aquella que se manifiesta con actitudes corporales de agresión como miradas de desprecio, desaprobación, rechazo, indiferencia, y gestos insultantes para descalificar a la persona.

Otra forma de comportamiento que sin ser violenta puede causar daño es cuando los padres sobreprotegen a sus hijos (as) y el excesivo consentimiento pues los confunden con amor y afecto.
Es muy común para mi atender este tipo de casos en donde los padres han sobreprotegido a sus hijos en exremo. Son muy inseguros para tomar decisiones, siempre están buscando la aprobación de sus padres. Son temerosos, nerviosos, y no se creen capaz de lograr sus objetivos ni tampoco creen en sus propias capacidades o aptitudes.

Cuando se sobreprotege a los hijos se les dice que hacer y que no., que les conviene y que no les conviene, se les priva de tomar sus propias desiciones y de cometer errores para hacerse responsables de su propia vida y aprender de ellos. Se les priva de que  tengan seguridad y autoconfianza, de que tengan iniciativa. La sobreprotección hará adultos inseguros y miedosos, irresponsables e incapaces de resolver sus propias vidas. También puede hacerlos dependientes.

Violencia sexual.

La violencia sexual se puede presentar como acoso, abuso sexual, violación o incesto (que es cuando suceden actos sexuales con algún miembro de la familia).

Abuso sexual.

Consiste en tocar y acariciar el cuerpo de otra persona contra su voluntad, asi como en la exhibición de los genitales y se exige a la victima que satisfaga sexualmente al abusador . Se puede dar de manera repetitiva y durar mucho tiempo antes de que el abusador quien se vale de su poder  y autoridad que tiene para llevar a cabo este acto, sea descubierto.

Dada la posición de autoridad de los adultos o de personas de mayor edad que las víctimas, el abuso sexual es mucho más común de lo que se pudiera pensar. Los agresores mas comúnes son familiares tales como;vecinos, amigos, o familiares cercanos o lejanos (estos últimos ocupan mas del 70%) de los casos. Es por eso que para prevenir, es muy importante saber con que persona estamos dejando a esos pequeños (as).

Casi siempre, quien es abusado o violado sexualmente, es amenazado por el agresor a quedarse callado (a). Si has sufrido de algún tipo de abuso sexual, es conveniente la psicoterapia con un especialista para que te ayude a superar ese hecho. No podemos borrar lo ocurrido, lo que si podemos hacer es sobrellevar nuestra vida, a pesar de que lo que sucedió y mejorar la manera en la que nos relacionamos con los demás.

Cuando no se atiende el abuso o la violación sexual, casi siempre se tendrá el problema de relacionarse con el sexo opuesto o bien, al momento de la intimidad podrían haber problemas tales como falta de deseo sexual, ver la sexualidad como algo sucio o pecaminoso, negarse a tener relaciones eróticas con la pareja, en casos mas extremos podría haber dolor durante la penetración,  o incluso, aversión sexual. Todo va a depender de la manera en la que se hayan dado las cosas y la afectació que haya tenido esa persona.

Si fuiste violentado tanto física, sexual, emocionalmente o eres una persona violenta, es momento de que atiendas tu salud mental, acude con un psicólogo o psicoterapeuta de tu confianza, tienes derecho a sentirte bien contigo mismo (a) tanto si has sido violentado (a) en alguna etapa de tu vida como si has sido violento la mayoría de las veces. Hay que encontrar el equilibrio.

Este texto lo extraje de información de la sep, del libro de Susan Forward y de mi experiencia como psicoterapeuta pues en el transcurso de mi carrera profesional,  me ha tocado atender tanto a personas que han sido violentadas como a los que han ejercido violencia.






























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